Todos los años Desarrollo Zonal publica en sus páginas información sobre la vuelta de las mujeres de la ciudad que asisten a los encuentros nacionales que se organizan anualmente.
Tras la insistencia de una de ellas, Griselda Pérez, que año tras año invitaba a la directora del periódico María Inés Grath, este año Desarrollo Zonal decidió ser parte del Encuentro Nacional de Tucumán celebrado el 10, 11 y 12 de octubre.
Fue precisamente María Inés quien relató su experiencia vivida en este evento que aglomeró cenca de 25.000 mujeres que asistieron de todos los puntos del país, pertenecientes a distintas clases sociales, edades, ideologías y creencias.
“Realmente vuelvo enriquecida de esta experiencia que se repetirá el próximo año en Paraná, que será la sede 2010; allí estaremos. Agradezco a la comisión organizadora su invitación y a las más de 100 mujeres que me integraron y me hicieron conocer lo que es este encuentro nacional”, destacó la directora de DZ.
Los encuentros nacionales empezaron en 1986 y desde allí no pararon. Año tras año las mujeres de todo el país se reúnen para lograr que las voces de miles sean escuchadas, a través de una modalidad horizontal, abierta, democrática y participativa.
“«Qué momento, qué momento, a pesar de todo les hicimos el encuentro», fue el cantito que escuché días antes de la partida, en el preencuentro en la Casa del Artesano. En ese momento me llamó la atención; después me lo explique”, comentó.
A respecto explicó: “Un taxista allá nos dijo: «¿Ustedes son las que vinieron a hacer lío a Tucumán?», un concepto bastante alejado de la realidad. Hay una difusión muy errada, por ejemplo, en casi todos los medios de comunicación donde aparece, aunque la mayoría ignoran a esta importante cantidad de mujeres en marcha, el encuentro es reducido a un solo tema: el pedido de la legalización del aborto. Pero en el encuentro se realizan más de 50 talleres con temáticas distintas y que serán desarrollados en las próximas ediciones del periódico para que todos conozcan de qué se trata”.
Hubo una apertura que se realizó en el Estadio Tucumán Central, luego talleres, una marcha de quince cuadras y un cierre con las conclusiones y elección de la próxima sede.
Durante la marcha se veían banderas en los balcones que decían “Sí a la vida”, y los tucumanos se apostaron en la Catedral rodeados de un despliegue policial increíble. ¡Tucumán por la vida! “Vivir el primer derecho humano” decían las pancartas.
Los pañuelos verdes que llevaban la gran mayoría de las mujeres de la marcha pedían educación sexual, anticonceptivos y aborto legal.
“Aunque no hay que reducir el encuentro a un solo tema, creo que es muy especial la temática del aborto, y estar a favor o no es algo muy personal. Cuando llegué a V.G.G me encontré con la noticia que una joven de 21 años había muerto por un aborto ilegal. ¿Quién puede estar a favor de la muerte? Personalmente creo que se debe legislar el aborto en casos especiales y con muchas mujeres que hablé se veían reflejada esta idea, pero también creo que es una realidad que muchas mujeres mueren por abortos clandestinos”, sostuvo María Inés.
Y agregó: “Si la iglesia no ve esta realidad y el gobierno se lava las manos, estamos en problemas, porque la educación sexual debe existir desde los primeros años y los anticonceptivos deben ser gratuitos y para todos, pero sin una concientización se seguirá demonizando a un sector y santificando a otro”.
Tras la insistencia de una de ellas, Griselda Pérez, que año tras año invitaba a la directora del periódico María Inés Grath, este año Desarrollo Zonal decidió ser parte del Encuentro Nacional de Tucumán celebrado el 10, 11 y 12 de octubre.
Fue precisamente María Inés quien relató su experiencia vivida en este evento que aglomeró cenca de 25.000 mujeres que asistieron de todos los puntos del país, pertenecientes a distintas clases sociales, edades, ideologías y creencias.
“Realmente vuelvo enriquecida de esta experiencia que se repetirá el próximo año en Paraná, que será la sede 2010; allí estaremos. Agradezco a la comisión organizadora su invitación y a las más de 100 mujeres que me integraron y me hicieron conocer lo que es este encuentro nacional”, destacó la directora de DZ.
Los encuentros nacionales empezaron en 1986 y desde allí no pararon. Año tras año las mujeres de todo el país se reúnen para lograr que las voces de miles sean escuchadas, a través de una modalidad horizontal, abierta, democrática y participativa.
“«Qué momento, qué momento, a pesar de todo les hicimos el encuentro», fue el cantito que escuché días antes de la partida, en el preencuentro en la Casa del Artesano. En ese momento me llamó la atención; después me lo explique”, comentó.
A respecto explicó: “Un taxista allá nos dijo: «¿Ustedes son las que vinieron a hacer lío a Tucumán?», un concepto bastante alejado de la realidad. Hay una difusión muy errada, por ejemplo, en casi todos los medios de comunicación donde aparece, aunque la mayoría ignoran a esta importante cantidad de mujeres en marcha, el encuentro es reducido a un solo tema: el pedido de la legalización del aborto. Pero en el encuentro se realizan más de 50 talleres con temáticas distintas y que serán desarrollados en las próximas ediciones del periódico para que todos conozcan de qué se trata”.
Hubo una apertura que se realizó en el Estadio Tucumán Central, luego talleres, una marcha de quince cuadras y un cierre con las conclusiones y elección de la próxima sede.
Durante la marcha se veían banderas en los balcones que decían “Sí a la vida”, y los tucumanos se apostaron en la Catedral rodeados de un despliegue policial increíble. ¡Tucumán por la vida! “Vivir el primer derecho humano” decían las pancartas.
Los pañuelos verdes que llevaban la gran mayoría de las mujeres de la marcha pedían educación sexual, anticonceptivos y aborto legal.
“Aunque no hay que reducir el encuentro a un solo tema, creo que es muy especial la temática del aborto, y estar a favor o no es algo muy personal. Cuando llegué a V.G.G me encontré con la noticia que una joven de 21 años había muerto por un aborto ilegal. ¿Quién puede estar a favor de la muerte? Personalmente creo que se debe legislar el aborto en casos especiales y con muchas mujeres que hablé se veían reflejada esta idea, pero también creo que es una realidad que muchas mujeres mueren por abortos clandestinos”, sostuvo María Inés.
Y agregó: “Si la iglesia no ve esta realidad y el gobierno se lava las manos, estamos en problemas, porque la educación sexual debe existir desde los primeros años y los anticonceptivos deben ser gratuitos y para todos, pero sin una concientización se seguirá demonizando a un sector y santificando a otro”.
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